Y volver a escribir después de eso fue tan difícil y doloroso que he procurado no asociar mi “trabajo intelectual” a ninguna otra sustancia tóxica. No he encontrado mejor antídoto contra la arrogancia de los tecnócratas que esa suma de ensayos, panfletos y apologías escritos con generosidad por los haraganes. Porque sólo el surgimiento de un nuevo mito, el mito de la salvación por el trabajo, podría revertir en el hombre su íntimo rechazo al yugo, su propensión a holgazanear. Esto es lo que finalmente sucedió en Italia, en la época en que Berlusconi pasaba del puesto treinta y cuatro a ser el cuarto hombre más rico del mundo. “Uno de los mayores placeres de la vida es viajar en una carroza que corre a toda marcha”, dijo el Doctor Johnson en el siglo xviii. Es el precursor de los outsiders, los dropouts, los artistas de la provocación, los okupas. No me justifico, pero es cierto que me sumergí en el fluido de la información por razones políticas, una tarde en París, después de una acción urbana que realicé junto con un grupo de mexicanos que radicaban en Francia. Los textos eran tachados de amazónicos por los lectores habituales del blog, pero yo no quería sacrificar aquellos ensayos que me reclamaban más tiempo y espacio. Más que una institución avocada a la propagación sistemática del conocimiento, aquello parecía un parque de recreo. ¡Y los organizadores de ferias se indignan porque declinas una invitación y prefieres quedarte a escribir en casa! En eso pensaba una tarde en que me encontré, casi al mismo tiempo y por azar, los horarios de trabajo que se habían autoimpuesto dos temperamentos antagónicos: el diligente Benjamin Franklin, rector de la ética del trabajo, y el indómito y más bien estrafalario músico francés Eric Satie. Las saturnales no eran cualquier celebración, sino la fiesta cumbre de la Antigüedad, también llamada la "fiesta de los esclavos": unas vacaciones auténticas hechas de tiempo liberado, un carnaval en el que todas las jerarquías sufrían un vuelco radical. Basta con echar un vistazo a las grandes cadenas de librerías o revisar los catálogos de las corporaciones editoriales. Robert Walser, Jakob Von Gunten: un diario. Hace tiempo que nos afanamos en acumular una cantidad interminable de conocimientos e información que somos incapaces de asimilar. A los frívolos. Slavoj Žižek, El acoso de las fantasías. Me topé con un esténcil. El ocioso hace habitable una ciudad, la devuelve a su dimensión humana, porque su espíritu es anterior a la ciudad misma. Tal vez por eso, a diferencia de Caín, Abel no se extenúa. Indócil, el joven se preguntará, como lo hizo hace más de un siglo Edith Wharton: “¿Por qué todos deberíamos ser lectores? :( (me pregunto qué habrá pasado para que Hu Jia cambiara de opinión pero, sobre todo, ¿qué pasaba con el mundo entero ante el espectáculo de toda esa miseria? Se trata de una aventura emprendida en los meses posteriores a la Revolución de Octubre entre un grupo de escritores y personas próximas al libro —el 237 novelista y dibujante Alexéi Rémizov, el pensador Nikiolái Berdiáiev, el novelista Mijaíl Osorguín, además de algún periodista en ciernes, un historiador del arte y un "bibliógrafo excepcional"—, con la intención más o menos chiflada de construir un refugio en pleno caos, para que los libros pudieran, aún, circular. /Dales alegría y gloria. “Yo escribo lo que quiero; escribo para mi propio placer; escribo por mi propio riesgo; mi tarea, es entonces, estrictamente privada. Para los otros, para los escritores desesperados, 281 anómalos, insolentes, para los traidores que aún se mofan de la norma y desean escuchar la lengua fuera del poder, en el esplendor de eso que Barthes llamó “la revolución permanente del lenguaje”, para ellos, para nosotros, no hay ingenuidad posible cada vez que nos asamos, como San Lorenzo en la parrilla, dando vueltas alrededor de las preguntas manidas de la prensa. ✴ “Los niños se moverán en la playa como una plaga. En estos días, por ejemplo, crece el número de verduras discriminadas, hechas a un lado del mainstream. Reducen el apetito: te hacen sentir más lleno Reducen la absorción: la grasa se absorbe menos rápidamente Aceleran el metabolismo: te permiten quemar más grasa Las pastillas verdaderamente efectivas son saludables y generalmente están hechas con extractos de plantas y fibras. A menudo parece como si los escritores reservaran para su propia producción justamente las horas que les quedan libres de las obligaciones, de las salidas, de las citas y de las inevitables celebraciones”. La clave está en no dejar de hacerlo. —Pues va a beber un whisky conmigo —añadió el joven. Nadie entendería su urgencia, su anhelo, esos breves, frágiles, momentos de felicidad, después de varias noches de transpiración frente a la página. Pamela contempló los rostros de los que habı́an entrado y comprendió que el mal serı́a menor si obedecía. Así se construyeron las Escuelas del Nuevo Orden donde se aprendía a macanazos. Los estudiantes y trabajadores 114 protestaron por toda Francia; no deseaban ser explotados con el descaro de la magnanimidad. 4. Pamela les vio marchar con un gesto que quería ser una sonrisa. En contra de la santurronería de la lectura que hoy impera en los medios, el lector insumiso ha hecho su elección, defiende una posición, libera una zona del espíritu. Cómo hacer Batido de plátano y avena para adelgazar: 1. Tengo fama de gran maestro en el arte del silencio”. Eran trescientos y sabían que juntos constituían un solo cuerpo invencible. Madrid, Alianza Editorial, 2007. Estos cinco escritores sin nombre no sólo han hecho rechinar las quijadas de los magnates de la edición, sino que han denunciado el efecto nefasto de su expansión voraz, la forma en que los monopolios de la cultura convertían los frutos intangibles del pensamiento y el arte en mercancías cautivas. Pamela vio la invasión con indiferencia. El plagio abraza la frase de un autor, utiliza sus expresiones, borra una falsa idea y la sustituye por otra correcta"); los experimentos dadaístas; los readymade; Pierre Menard (autor del Quijote); Guy Debord y todos los détournements (o desvíos) situacionistas; los juegos combi- 272 natorios del oulipo; Georges Perec; William Burroughs; Luther Blisset; Wu Ming; el Critical Art Ensamble ("El plagio pertenece a la cultura posterior al libro, puesto que es en esa sociedad en la que se puede hacer explícito lo que la cultura de los libros, con sus genios y sus autores, tiende a esconder"); Jonathan Lethem (ensamblador de un ensayo brillante, Contra la originalidad, que rastrea los procesos de apropiación y pillaje en la literatura y el arte, con ejemplos que van de Lolita de Nabokov a las canciones de Bob Dylan; ese ensayo promiscuo fue escrito de manera íntegra con la técnica del copy-paste); Agustín Fernández Mallo (que tuvo la osadía de poner en circulación El Hacedor (de Borges) Remake, luego retirado de las estanterías por María Kodama), Pablo Katchadjian (acusado por Kodama6 ante la publicación, en 2009, de El Aleph engordado, es decir, el traslado de las 4,000 palabras originales del célebre cuento a 9,600 bajo la regla de "no quitar ni alterar nada del texto original, ni palabras, ni comas, ni puntos, ni el orden", de tal forma que si alguien quisiera, podría volver al texto de Borges) o el poeta estadounidense Kenneth Goldsmith (fundador de UbuWeb y autor de la antología cumbre del plagio anarquista, Against Expression), quien alguna vez se preguntó: "¿Por qué sólo los literatos (a diferencia de los músicos, los artistas, los programadores) se siguen escandalizando a estas alturas por el plagio?". Nosotras, en cambio, como nuestro padre, adorábamos la cama. Ningún obstáculo parecía entorpecer ese movimiento 175 en ascenso del capitalismo industrial, ningún retrato de la miseria, ni siquiera las imágenes de las hambrunas que aparecían en la misma revista, podría eclipsar aquel esplendor. La insatisfacción se adueña de ella mientras se aplica el bronceador y no puede dejar de pensar en lo que habría llegado a ser si hubiera sido fiel a sus impulsos de juventud. Cada dos horas (a veces, menos) reviso obsesivamente mis correos y las respuestas o interacciones generadas con mis tuits. seguramente embaucador monotemático incluso y mis maestras de la primaria, que me tenían por una alumna ejemplar, se jalarán los pelos de la peluca cuando se los regale con dedicatoria pero nada más este libro nunca verá la pira porque el silencio de los libros no atraviesa hoy por la censura, sino por la indolencia) un Estado realmente eficaz (escribió Huxley) sería aquel en el cual los jefes pudieran gobernar una población de esclavos sobre los cuales no fuese necesario ejercer coerción alguna por cuanto amarían su servidumbre inducirnos a amarla es la gran tarea asignada a los Institutos Benjamenta de la Crisis a los analistas financieros de la tv a los directores de periódicos a los maestros de escuela y a un ejército compacto de plumas domesticadas que nos llaman a caminar en sentido contrario al de Bartleby (el oficinista que prefería no hacerlo), para lanzarnos ahora a los brazos de nuestro empleador ¡trabajar más y cobrar menos es la fórmula de la reconstrucción! Por eso, la jornada de mi escritura 242 comienza casi siempre del mismo modo, en medio de una vigilia silenciosa y clandestina, de espaldas al mundo de los que duermen, y en pantuflas. Monsanto, por ejemplo, hostiga a los agricultores que se niegan a sembrar su semillita de maíz patentado. Ver turmalina Verde. —No me preocupa quiénes sean las autoridades. De un lado están los que consideran que compartir el link o la fotocopia de este ensayo es criminal, algo que te convierte en un pirata en potencia. Es la insolvencia, el fragmento, la falta de control sobre la trama inestable de la vida (la derogación de la trama). Frente a las convenciones de una cultura cada vez más complaciente y frívola, entregada a la pura especulación económica y los códigos mediatizados, y por eso incapaz de responder de manera creativa a las convulsiones del mundo, la moratoria artística de la que hablaba Blissett proponía un deslinde, el retiro voluntario de un sistema donde las obras exhibían cada vez con menos pudor su condición de marionetas banalizadas, acríticas, muertas. Estaba huyendo, en suma, de la frivolidad imperante de la literatura mexicana, en cuyos tentáculos comenzaba a enredarme estúpidamente. (si abre la ventana, los verá acampando en Zucotti Park son los Occupy Wall Street los sindicatos de Wisconsin los indignados españoles los estudiantes chilenos los estudiantes mexicanos son la señora Wagner el día que decidió escribir una pancarta y la srita. Con su renuncia quiere decirnos algo. Blissett, el hombre multitud, sabía (debería escribir: sabían) que su única fortaleza, como la de los auténticos piratas, radicaba en no ser visto, estar en todas partes, ser más rápido, multiplicarse. Es una música políglota y está rodeada de signos y referencias, como Nueva York o su propio departamento. este es el diagnóstico más lúgubre: para millones de personas la crisis es el 136 momento de la resignación el clima en que se acepta lo inaceptable el señor y la señora Wagner (y también la familia Chaeng-Dong y los Hernández), por ejemplo, pensarán que es mejor ser explotados en el trabajo que no tener trabajo alguno ¡es que es eso o nada!, se dirán por las mañanas para comprender su no-elección como los muchachos del Instituto Benjamenta (en la novela de Robert Walser), los seres de la crisis se entregan a un profundo abandono son los alumnos perfectos en el arte de la subordinación nunca llegaremos a nada; la enseñanza que se nos imparte consiste sustancialmente en inculcarnos paciencia y obediencia así habla Jakob von Gunten, un joven estudiante del Instituto que aprende a ser un hombre insignificante en vez de formar individuos, el Instituto Benjamenta los disuelve: personajes anónimos minúsculos sin ideas personales deambulan por los pasillos en busca de su propia humillación ¿qué mejor lugar para los que se han persuadido de que no existe otra opción que la precariedad y terminan por querer voluntariamente lo que alguna vez se les impuso por la fuerza? Bueno, con 105 mi padre hablaba de libros. Estos gritos, mezclados con los que otras mujeres proferı́an a pocas yardas de distancia, hacía de la calle principal de Silver City una verdadera Babel. Hay que releer esos cuentos de Pitol que acaban como ensayos o esos ensayos que terminan como cuentos para alimentar al “monstruo informe” del ensayo, en lugar de engordar sólo a la razón. Christian Salmon, Tumba de la ficción. si la vida es tan breve, ¿por qué desperdiciarla cuestionando todos los días el estado de cosas? Sin embargo, entre los escombros de la historia sobrevivieron algunos ejemplares como 238 las Poesías de Marina Tsvietáieva, que aparecen en facsimilar, junto con los dibujos de Rémizov, en la magnífica edición que tengo ahora en mis manos. Uno se denigra en cuanto olvida sus propias ideas (vive en la separación consumada); el otro crece por el simple hecho de asumir el riesgo de su formación interior. Sócrates, Diógenes, Aristipo, Epicuro, Séneca, también fueron filósofos que ejercitaron el pensamiento, pero sólo en función de transfigurar la vida. Las interpretaciones del episodio sangriento no se hicieron esperar. Y eso vale lo mismo para el cine que para la literatura. Y luego veo corporaciones gigantes que se juntan y se hacen aún más poderosas, como eso que ha pasado con Polygram y Universal. De espaldas al mundo, es probable que en esa cueva imaginaria Kafka pasara demasiado tiempo, emancipado de la vida activa, y se le olvidara incluso la hora de comer. Llegar más lejos, cada vez más rápido. Seríamos lo que ya somos: seres aturdidos, atareados siempre en nada, incapaces de pensar. Por otro lado, la digresión no es rentable, está ligada irremediablemente al aplazamiento. No era sólo que Henry James estuviera siendo suplantado por un ejército de John Grishams, ni que Bouvard y Pécuchet fuera relegado al sótano por los remedios adulterados de la superación personal. Mientras tanto yo he seguido el camino desviado de este diario y luego he pasado tres semanas chapoteando sin mayor gasto (cuarenta pesos al día) y me he dado el lujo incluso de aburrirme, como los gatos o los niños que no le temen a la cercanía de sí mismos. Maestro mecánico, Marcos Carrasco, garantiza riguroso control de calidad en rectificación de motores. El movimiento de quien permanece inmóvil, eso debió entusiasmarlo enormemente: la forma ramos el accidente, la mayoría de nosotros sería incapaz de comprar un auto, mucho menos de conducirlo? Durante la noche, mientras América duerme, las redes cibernéticas siguen dictando su mensaje desde el otro lado del mundo y, al despertar, la secretaria del departamento de facturación encontrará su bandeja de entrada con toneladas de correos electrónicos por responder, es decir, de trabajo acumulado. Quizá por eso, el día que mandé a mi jefe al matadero, todos los fieles del yugo me miraron con desprecio, casi incluso con horror. Jerome K. Jerome, Divagaciones de un haragán, en Obras. Tal vez lo mejor sería mudarme al campo, 96 como hizo Wilcock que se había retirado “a una casita sencilla, con pocos muebles, escasos cacharros y un estante de libros”, como escribe Ruggero Guarini en la introducción a la La sinagoga de los iconoclastas (título extravagante si los hay, casi tanto como El estereoscopio de los solitarios, del mismo Wilcock, espíritu libre y alucinado). Cosa rara: los doce infiltrados se hacían llamar Luther Blissett. El encuestador promete no quitarle mucho tiempo, esa materia tan preciada para el lector. Por favor, contacta con el desarrollador del procesador de este formulario para mejorar este mensaje. De ese modo la industria del ocio, en realidad, industria del entretenimiento, ha sido diseñada para reproducir las reglas del trabajo dentro del llamado "tiempo libre", un tiempo que para producir dividendos ha de mantenerse siempre activo. Ese tipo de delirios totalizadores me producían una incomprensible fascinación en la adolescencia; crecí rodeada de libros y durante cierto tiempo alimenté la convicción (autoritaria o ingenua) de que la Verdad se encontraba en la Biblioteca. Al final de cuentas, no importa en qué lugar de la escala nos encontremos, todos hacemos fila hacia la muerte, la gran democratizadora. En aquella época yo quería ser editora (y escritora y cineasta y experta en neurobiología). Gracias a internet puedo trabajar la mayor parte del tiempo desde mi casa y vivir al margen del checador de tarjetas, sin rendirle cuentas a ningún jefe despótico, un privilegio que me he obstinado en preservar a toda costa y que en las actuales condiciones tecnológicas podría ser un privilegio compartido por millones de personas, y configurar una nueva ética del trabajo o, mejor aún, una ética del ocio (el uso sabio y fecundo del tiempo propio), si no fuera porque desde niños se nos inculca la máxima del sacrificio: “Es preferible hacer cualquier cosa antes que nada”. “La fórmula para derrumbar al mundo —escribió Débord en 1959— no la fuimos a buscar en los libros, sino vagando junto a cuatro o cinco personas poco recomendables [...] Aquello que habíamos comprendido no fuimos a contarlo a la televisión. He aquí una táctica de fusión entre el poder económico y el cultural dentro del paisaje (¡Insuperable! Paul Morand dijo que la velocidad —la droga del siglo xx— no era sólo un estimulante, sino también un deprimente, un explosivo cuyo manejo era peligroso, capaz de hacer saltar no sólo a nosotros mismos sino al universo entero. Después de todo el pirata cibernético no es más que alguien que desea navegar alegremente por el mar que él mismo ha creado. poner a bregar a toda esa gente que sólo lee y escribe, y encima le gusta la bebida. “To bend is not to beg”, reza la antigua proclama de los espigadores. 4. Por eso, la crónica de Osorguín es mucho más que una curiosidad editorial: es un trozo de vida cotidiana recobrado de las tinieblas que nos permite saber más sobre la historia social y política de la edición y nos introduce de nuevo en los misterios del 239 libro, en el tipo de pasiones que es capaz de provocar entre los individuos. Una serie de ensayos clínicos ha encontrado que las personas con sobrepeso que tomaron té verde, ya sea en forma bebible o en . Tal vez por eso, en cuanto llegué a Buenos Aires hasta la basura que se acumulaba en sus calles (había una huelga municipal) me pareció atractiva. La noción de futuro es una noción empobrecida, su vigencia es de una semana y aun así la gente se sacrifica diariamente por ella, por la jubilación o el crédito hipotecario o la cuota vencida del estercolero donde irán a parar sus restos cuando muera. México,Verdehalago, 2010. vvaa, Potlatch. ¿A qué aspira? Sino un placer que se interroga y que hace de la velocidad de las redes y sus posibilidades, pero también de la deriva urbana, los banquetes y la conversación, un espacio para fomentar la insolencia y planear la diatriba. Varda lo documenta: la práctica de los espigadores no se ha detenido jamás; en realidad sólo se transfigura, se desplaza, crece, va de los surcos de tierra a los fosos marginales de las grandes urbes. ¿Cómo podrían soñar con un auto de seis velocidades, luces de xenón, rines 17, ellos que ni siquiera tienen refrigerador? En el colegio, esa zona ha sido condenada al rincón de los reportes de lectura, los exámenes de opción múltiple, las fichas biográficas, nada. Por eso, porque está dominada por los roles de la figuración y los valores de la ganancia, me sucede que la escritura a destajo y la facturación por cuartilla me producen violentas reacciones de carácter respiratorio, nervioso o eruptivo. Y en efecto, el ramalazo financiero llegó pocos meses después de que la clase media urbana hubiera comenzado a es- 14 tampar sobre los muros de la ciudad su total desconfianza hacia el sistema y sus precios dolarizados: su vida peligra, anunciaban unas figuras silueteadas en uno de los esténciles más ominosos y bellos de Palermo. Una interrupción de la línea narrativa o discursiva. El ocioso, que no aspira a ningún título, suele estar mejor dotado que cualquier doctor honoris causa para demostrar, en los hechos, el gran Teorema de la Cualidad Vivible de la Vida (la idea es de Stevenson), es decir, de educarse a sí mismo a partir de la propia experiencia. ¿De 201 qué sirve entonces obstinarse? Me miró de reojo, como si se empeñara en moverse lo menos posible. Pink Martini, “Je ne veux pas travailler”, en Sympathique, 1997. Tendría que ser un artefacto lento, torpe incluso, 66 hedonismo atizado por el consumo. 5/ No es que el ensayo se haya democratizado, masificado o envi- lecido; es simplemente que el ensayo se esfumó. Se trata de Educando a Arizona (1987), la segunda película de los Coen, una comedia enloquecida sobre los falsos sueños de la felicidad doméstica. Café negro intenso con 1105 mg de cafeína de The Black Coffe Insomnia. ¡Justo en medio de los funerales de la escritura! Mi padre es empleado de la empresa estatal más grande del país, donde todos checan tarjeta temprano, pero casi nadie trabaja. No tenía reclamo a la puerta y en su local no había una sola mesa dedicada al juego. Una imagen que parece tan antigua como la agricultura misma, como si agacharse para hurgar en los escombros fuera un recuerdo de ciertos gestos nómadas, los primeros hombres rastreando su alimento a pleno sol. Si el tsunami global arrasará con todos los árbitros del futuro, ¿para qué sacrificar las satisfacciones inmediatas de la vanidad? hombre así no es un ocioso, hay que Diario de una desintoxicación. Barcelona, Anagrama, 1980. Barcelona, Anagrama, 2000. Desaparecer, esa será la finalidad suprema de la Cámara de Escritores Desocupados, que habrá contemplado desde el principio su propia disolución. Me dediqué a caminar, me hacía falta calle. Pero no lo haré con horarios ni jefes ni grillas ni oficinas. Pero en Manhattan, Los Ángeles, París, Barcelona, Hong Kong, Londres, Berlín, Tokio y recientemente en México2, los recolectores anarquistas anunciaban una crisis —la saturación irracional del sistema de consumo—, agrupándose alrededor de pufs y love sits abandonados, cacerolas y lámparas apenas rotas, los guijarros de hojalata dejados en la orilla por las grandes mareas de la novedad. ✴ El memorándum, el oficio y el reporte son géneros en los que no se han hecho muchos progresos. Porque la sociedad no soporta la exhibición de su propia obscenidad. Los ventajistas eran una casta que se unían de una manera firme. ¡Viva la piratería!”. 73 Valeriana officinalis, passiflora incarnata, gingseng, esteroides anabólicos, taurina. Es un coleccionista y su fortuna es etérea, una condición superior, algo que le hace caminar como si flotara. Su única distracción: los automóviles. Qué monserga. 3/ La confusión que ha promovido el mercado en el arte y la lite- ratura ha terminado por depreciar, también, al ensayo. Que las intenciones del autor sean identificables, modestas y se atengan a la ortodoxia de los géneros. Bla bla bla. En Londres me han tomado por alemana y en Alemania me han preguntado si soy china, maya o azteca. ¿Acaso Converse no fabrica zapatos y ropa para las personas de todo el mundo que viven con optimismo, creatividad y rebeldía? Sobre todo si se oye obsesivamente de camino a la escuela: Jabón del Tío Nacho desinfectante de la piel y cuero cabelludo. ¿es eso o nada? Para qué sirve. Aunque lo común es el ejercicio mixto, combinando las pesas con el cardio, está demostrado que el entrenamiento de fuerza sí produce quema calórica y por tanto, a la larga, ayuda a perder peso. Pero esa era apenas la punta del iceberg. Eso es todo: un rayón en la pared. Ni siquiera sé si son serios en su profesión poética". Su deserción escandalizó a los maestros, a los académicos, a los escritores, a los intelectuales y a George Steiner quienes culparon de inmediato a la televisión, al iPod, a la prisa, al fin de las humanidades, a internet. Porque así, inmóvil y puesta a contemplar su paisaje interior, le ha llegado de pronto la sensación recalcitrante de haber desperdiciado una vida, la certeza de que, lejos de la oficina, ya no es nadie. Pero al ocupar una página entera de Le Figaro, su raro modo de vida, que hasta entonces había sido refractaria a la ética del trabajo, se normaliza, se introduce en la cadena de producción y cumple una función en el mercado del tiempo libre: la del experto que sube 256 al empíreo de las palabras para distraer o iluminar a los hombres, mientras descansan de su propio fastidio, los domingos. Desde despertarme antes del amanecer hasta rechazar cualquier invitación a salir de casa después de las seis de la tarde. Alguien diría que se trataba de procrastinación, indolencia, falta de compromiso. La idea de que la cultura puede ser propiedad —propiedad intelectual— se usa para justificarlo todo, desde las multas que pagan los restaurantes por poner música en sus locales hasta el intento de patentar las posturas de yoga o la imagen de la Virgen de Guadalupe (que se encuentra ya en manos de los chinos). Se trataba de una “kermesse hermética procesional, que salía de la iglesia con su Papa, sus dignatarios, sus devotos y su pueblo —el pueblo de la Edad Media, ruidoso, travieso, bufón, desbordante de vitalidad, de entusiasmo y de ardor—, y recorría la ciudad [...]. La luna es la herida de la noche. Así le sucedía a Jerome K. Jerome, un haragán nacido en Inglaterra en plena Revolución Industrial, editor entre 1892 y 1898 del suplemento literario The Idler, además de profeta de un nuevo siglo de ociosos y dandies 82 que decidieron experimentar el tiempo de un modo distinto al del calendario. Tengo suerte: vivo con un escritor diurno que comprende mis necesidades y lleva a nuestro hijo a la escuela todas las mañanas. De un momento a otro, la celeridad de las ciudades sepultaba las costumbres que habían prevalecido el tiempo, abducidos por la velocidad de las comunicaciones instantáneas. Durante el Mundial de Futbol 2010 un pequeño escándalo se desató alrededor del zumbidito fastidioso (y omnipresente) de la canción oficial del torneo. Y así durante un rapto de furor destructivo el homo faber liquida de golpe al homo ludens. México, Siglo XXI Editores, 2011. vvaa, “Dossier. Ninguna galería quería mostrarlas. 2. ¿Me encontraba acaso ante las puertas de una percepción distinta? 18, Núm. Pero el espacio digital también. “You’re making the difference”, le dice mientras le retira el micrófono, tratando de limpiarlo discretamente para evitar un contagio de piojos. Breves estallidos, diseminación de las frases, pensamiento no lineal, contactos efímeros con las palabras de otros. Trescientos italianos subempleados —militantes del grupo I Desobbedienti también llamado Tute Bianche o Monos Blancos, refiriéndose al tipo de trajes desechables que usan los trabajadores contratados temporalmente— se reunieron en un conocido supermercado de Roma para hacer su primer acto masivo de shopsurfing (una estrategia de consumo sin gasto ingeniada por una multitud hambrienta). Preguntarán quién soy yo para advertirles que ella exige un servicio de jornada completa 99 o ninguno absolutamente. Chocolates Turín, ricos de principio a fin. He aquí un lenguaje que agoniza para dar paso a otro, y con él toda una idea de la escritura y del libro tal y como los había conocido hasta ahora. ¿Qué tendremos en otros cien años? Varda comienza su documental con un cuadro emblemático del pintor Jean-François Millet: tres mujeres recogen las sobras de la cosecha, la espalda inclinada, el cabello recogido por un pañuelo, los brazos llenos de espigas y hierbajos. Al remplazar tiempos de comida por agua o al mantener tu estómago lleno de agua, vas a bajar de peso, pero no de . Edith Wharton De pronto toda la expectación fue a caer sobre el último lector. Nadie me puede decir que el ocio no es fecundo. Un hacker (que preferiría no ser llamado pirata, ese criminal) se define a sí mismo como un niño que desarma un reloj para ver su mecanismo; pero a veces, al armarlo de nuevo, descubre que ha creado algo distinto. Cuando tengo la mala fortuna de toparme con verdades absolutas como ésta, no me queda más remedio que tratar de imaginar a la luminaria que las proclama sin pudor a los cuatro vientos. El brand system no es otra cosa que la anulación del individuo por su apariencia vendible, la forma en que nos degradamos a cambio de nuestra membresía social. Y el impuntual es visto entonces como un paria, incluso como un traidor. 296 Thorstein Veblen, Teoría de la clase ociosa. Es verdad que en su desprecio al trabajo, el ocioso socava uno de los cimientos de la, así llamada, civilización. Eso duró cuatro o cinco días agotadores de tan vacíos. Se trata de un segundo momento del détournement situacionista, una estrategia de contrafuegos, que hasta ahora ha mostrado su capacidad si no para desestabilizar al sistema, por lo menos, para enfrentarlo en sus propios términos: la recuperación de su discurso para obli- 204 garlo a decir lo contrario de lo que quería. El entretenimiento propone un mundo liso, obvio, confortable, sin escollos para el espectador. Alguien nos ha querido vender algo que nos pertenecía de antemano. Se ama odiando, se odia amando. La prensa se ha convertido en la guía de lectura del lector contemporáneo, una guía que vuelve insignificante a la escritura misma (¡todo tiene sentido! Beber entre 1 a 6 vasos de whisky por semana ayuda a prevenir la demencia y algunas . Así sucede con Dude cuando una mañana la realidad lo alcanza con un puñetazo en la cara y lo involucra en una trama infernal construida sobre líos ajenos. Como Gaetano Volpi vivimos dominados por el terror a la conspiración contra el Libro sin sospechar que el asesino está en casa y somos nosotros mismos. Cuando salieron de allí, habían bebido varios litros. Esa máquina de desaceleración es la escritura, capaz de retardar el curso del tiempo. Ahí la literatura te saltaba encima como las moscas, o sea, como algo natural y ligeramente incómodo y perturbador. ¿Y si los freegans fueran nuestros desaguadores de emergencia ahora que nuestros despojos se han desbordado, saturando de miasma las ciudades y los mares? Esa es la misa del empleo a la que todos van a comulgar, incluso en esta época sin dioses y llena de trabajo en la que meter datos en una computadora carece de cualquier mérito espiritual. intensificada, la cercanía del peligro: todo aquello propiciaba una sensación de ingravidez. La escritura aparece entonces como una barricada temporal frente al exceso de realidad, aunque luego se acumulen las deudas y la vida se convierta en un recibo por firmar. Su bigote está manchado. Ya hemos visto cómo el ensayo ha sido oficialmente condenado a desaparecer bajo la tiranía de la información, la polémica y el entretenimiento, las tres formas predilectas de la falsa democracia de la cultura de masas. No me resulta nueva. En teoría, añadiendo una sola cucharada, podrás perder más o menos unos 1.2 kg. No se trata sólo de estilizar la atrocidad del accidente, sino de internarse en él para tratar de entenderlo. Y un principio de seducción implícito. 9. Había caído en una trampa y lo sabía: después de varios años de escritura en la sombra y miseria funcional, me había llegado la hora de buscar un empleo y un sueldo fijo y lo hice incluso con entusiasmo. Los trabajadores (migrantes sin papeles) no se encuentran en condiciones distintas: criaturas sin contratos, sin defensa, sin valor y sin forma, realizan operaciones cada vez más especializadas y mecánicas, cada vez más por debajo de lo humano. Algunos condiscípulos le lanzaron miradas de horror; entre ellos San Agustín, que escribió sobre el hecho en medio de su propio escándalo. Alguien le llamaría a esto sin exagerar una escenificación de la nueva lucha de clases. El contraensayo no es impostura. Mientras escucha el aleteo del viento o ve cómo se cortejan los pájaros, Abel vigila a su rebaño. ¿Será porque también sospecha que la velocidad se ha convertido en nuestra mejor coartada para no pensar? Una mañana desperté sin poder moverme de la cama, el cuello inmóvil, la espalda doliente hasta el aullido. ¿Cómo vivir en una realidad que ha perdido sus códigos éticos? Mírenlo ahí ensimismado a la sombra de los árboles, viendo pasar las horas como si las horas no existieran. Adiós a la granja. El ocioso prefiere la dignidad ausente del vagabundo, ajeno a los documentos y los fichajes, que ser reducido a la condición de cadáver viviente". Porque en la ronda generacional de los animadores de hotel (como en las familias circenses) parece que no hay variación posible; ni pasado ni presente ni futuro: cada día vuelve a empezar, idéntico a sí mismo, el círculo perverso donde el ocio se ha convertido en una extensión más del trabajo. Lleva décadas consumiendo música, devorando a Marguerite Duras, viendo (y escuchando) a Bugs Bunny, asistiendo a las funciones de medianoche. Lo más grave es que a la larga muchos escritores sin talento se convierten bajo 254 este sistema en nombres respetables, desprovistos ya de cualquier propensión para la crítica. La travesura de Blissett insistía: eran ellos, los miembros de la élite que controlaba la ciudad, quienes deberían inspirar terror o, por lo menos, desconfianza… “¡Basta ya de especulación inmobiliaria, de privatizaciones que benefician sólo a unos pocos, de favoritismos de amigos en asuntos de todos, de represión social, de prohibiciones culturales, de promoción del transporte insostenible y de políticos corruptos!”. Una de esas tácticas es la adopción de reputaciones imaginarias, la vuelta a la vieja estrategia del camuflaje literario, el uso de pseudónimos, heterónimos, anónimos. Tiene que ver con los estados de ánimo y las cosmogonías individuales, con el tipo de mundo que cada lector quiere ir creando para sí mismo. ¿Y eso qué tiene de malo? Escribiendo: así se alivia el alma del shock de la velocidad. Más tarde el tropel se dirigió a una librería para repetir la acción y negociar una rebaja en libros y cds, “porque la canasta familiar debe ir del sabor al saber”, dijo Francesco Carruso, portavoz napolitano de la organización. Incluso, las mujeres, de por sı́ más sensitivas, se hallaban endurecidas hasta la exageración y la indiferencia. “Pero es que no hay noticias”, le explicaba Ribeyro, a lo que su jefe respondió: “Pues invéntese una”. Mientras la gente hace fila para consagrarse al consumo, el Reverendo Billy se aproxima a la caja registradora y de pronto, poseído por la fuerza de la devoción, comienza a exorcizarla: “¡Aléjate de nosotros, Espíritu de la Falsa Necesidad!”. En cualquier caso, la ambigüedad moral del pirata prevalecerá y su bandera ondeará aquí y allá para significar muchas cosas. Era imposible rebasarme. Conozco a uno, amigo mío, que borra sistemáticamente sus tuits. Quema más calorías en comparación con otros tipos de ejercicios. Al final de su libro sobre la vida de los filósofos cínicos, y de Diógenes en particular, el filósofo francés Michel Onfray convoca 190 a la práctica de un nuevo cinismo, una sabiduría jovial y al mismo tiempo insumisa capaz de descubrirnos una alternativa frente “a los mercaderes del apocalipsis y los teóricos del nihilismo”. Lo llamaré contraensayo. Me respondió: “En mí mismo”. Como lo haría con el tema del asesinato, la belleza del incendio y los efectos del láudano, lo primero que advirtió De Quincey frente a la llegada del coche correo fue el acontecimiento estético, esos “grandiosos efectos visuales logrados entre la luz del coche y la oscuridad de los caminos solitarios”, esa “gloria del movimiento” asociada a la sucesión trepidante de las imágenes nocturnas. Como ha señalado Lessig en su libro Free Culture (cuya versión gratuita en español fue traducida como Cultura Libre, una lectura indispensable para entender el momento actual), se trata en realidad de una lucha que se reaviva cada vez que una innovación tecnológica amenaza con disminuir el poder económico de la industria. Y siempre, tal vez por esta circunstancia, estaba lleno. Si, como escribió Weber, el espíritu del capitalismo encontró en la ética protestante su justificación esencialmente religiosa, más tarde, con la muerte de Dios, la clase media encontró en la compulsión laboral un nuevo credo, o mejor aún, un nuevo vicio, el vicio del trabajo, esa forma anestésica (y hasta productiva) de escapar a su propia nada. Los críticos de arte y los curadores (siempre dispuestos a adoptar lenguajes esotéricos) alzan las orejas y ponen atención (quieren escucharlo todo para echarlo pronto a perder). Me sentía feliz, aunque en el fondo aquella felicidad era un poco tétrica. O en otras palabras: el contraensayo se parece cada vez más a ese acto sugerido por Debord: abrir los tejados para poder pasear a través de ellos. Supervivencia y Bienestar, julio-agosto 2005. Viajé a Buenos Aires en busca de los libros que ya no encontraba en México, del cine que aquí nunca vería (el de Mariano Llinás, por ejemplo) y del talante ácido, inconforme, arriesgado del porteño post corralito. Y no la critico por eso. Sin embargo. ✴ En mis vacaciones permanentes me he liberado del fin de semana y la obligación sagrada de descansar. 34 contra la aspirina He despertado con migraña y he odiado una vez más a la aspirina. Tomé un curso de fotografía analógica y me compré una Canon AE-1. Un ensayo civilizado, un género humanista. Pero le hará falta el riesgo, la profundidad, las visiones súbitas del segundo. [10] Por ejemplo, puedes tomar yogur para el desayuno o tomar un vaso de leche semidescremada con el almuerzo. Ha gritado que no, llevando al extremo la actitud radical que ha perdido la literatura, y le ha cerrado la puerta —quizá para siempre— a ese objeto rectangular que otros veneran como si fuera una urna. Reunir todas las cosas en una sola es una vieja aspiración humana tan desmedida como la idea de progreso. ✴ No, señor, mi patrón no es el lector. Por la noche, Pamela recogı́a los tickets de sus empleadas y abonaba a las mismas la mitad del importe. Los desobedientes entraron con sus bolsillos vacíos, pero no por eso escatimaron frente a los embutidos o los refrigeradores de lácteos. Seguramente Caín también sentía una envidia secreta hacia el ocioso. ✴ Es difícil ser una ociosa de verdad en esta ciudad, donde la gente anda siempre a la cacería del beneficio o en la lucha por la subsistencia. ¿Quién era ese hombre que podía pagarse el lujo de tanta lentitud? El blog como bitácora de nuestros procesos mentales y estéticos. 225 el lector insumiso No hay vicios más difíciles de erra­ dicar que aquellos que popularmente se consideran como virtudes. La respuesta es crítica ficción, la muestra de que el ensayo también practica la imaginación de lo posible, y no sólo la argumentación plomiza. Y juro que he puesto todo de mi parte: he sido constante, he tenido fe, he invocado. 8/ Pienso en algunas vías de salida. Para la escritura del consenso no hay cambio que emprender. Con la piratería arranca una 161 historia secreta hecha de personajes como el Lolonés, Barbarroja, Francis Drake, una genealogía tan antigua (y tumultuosa) como la oficial, la de la realidad estatuida, la de los policías y los políticos, esos “grandes rufianes legales”, como los llamaba el capitán Bellamy. Cuando alguien se aprendía un poema de memoria y lo repetía más tarde frente a otros, ¿estaba cometiendo un delito? Ni siquiera una dosis extraodinaria de valeriana officinalis podría haber detenido aquella erosión, una grieta inmensa abriéndose paso en mi sistema nervioso. Remplazan una alimentación por agua (sus productos casi no tienen nutrientes importantes) y por ende bajas de peso. Ahí la cultura no parecía un objeto de lujo en disputa ni una carrera burocrática ni un desierto mediatizado. Acepté encantada y el resto de la tarde me dediqué a pasear entre jardines, estanques, huertos de lechugas hidropónicas, laberintos construidos con arbustos. La supervivencia había sustituido a la vida, pero de todos modos la juventud porteña, la burguesía ilustrada, los escritores, los amantes del shopping parecían felices entre tanto confort de ensueño. Barcelona, Anagrama, 1994. Una noche, diez años después, exhalé tres cajetillas seguidas. Me he enterado recientemente de que al vocabulario de nuestros malestares se ha agregado un nuevo término: time-sickness, la percepción obsesiva de que el tiempo se desvanece, las horas extra ya no bastan y es necesario tuit), pero que al poco tiempo se convirtió simple y llanamente en una nueva adicción. Algunos jugaban cáscaras mixtas; otros improvisaban una banda crosta con tambor, gaita y trombón; la mayoría leía en las bancas o retozaba sobre el césped. Se perdería su carácter vaporoso, ligero, sensual, desenvuelto. Así, el lector insaciable se precipitó durante siglos tras los libros. ¿Ha pensado que las horas que tarda en desplazarse al trabajo y en regresar a su casa podría emplearlas en hacer el amor? Esta mezcla es muy eficaz para bajar de peso y se caracteriza por . Manifiesto hedonista. No es extraño que la gente los considere parásitos y chalados; después de todo, han faltado a las más básicas normas de urbanidad: se han desnudado del capitalismo a la vista de todos. 41 notas sobre los enfermos de velocidad ¿Y quién podría decirnos si no comenzaremos a cansarnos un buen día hasta de la propia velocidad? A veces varío: Kafka, Montaigne, Gombrowicz y los hermanos Coen. Buenos Aires, La Marca Editora, 1995. De ese modo leí Bartleby y compañía, algunos cuentos de Buzzati, los poemas de E. E. Cummings, las conversaciones de Gombrowicz con Dominique de Roux. Un día la librería tuvo que deponer 236 su nombre y junto con él perdía también su dimensión humana. Pekka Himanen, La ética del hacker y el espíritu de la era de la información. Este culto inmoderado me parece, por lo menos, sospechoso. Si el editor se atreve a molestarme por teléfono, yo bajo la velocidad aún más y no retomo la escritura hasta después de la siesta. El ocio le causa un incomprensible dolor. Igual que su adaptación al cine por David Cronenberg, la novela provocó ríspidas discusiones sobre los límites de la censura. Pero también un médico de urgencias, alguien que podría comenzar a curarnos de nuestro malestar con cierta dosis de serenidad y muchas horas para la vida especulativa, la lectura, la celebración comunitaria o los paseos en soledad. Él actuaba bajo mis ritmos habituales (esa lentitud mía que a veces lo saca de quicio), cuando no estoy bajo los efectos del estrés o la prisa. 271 También los que temen perder el control de su propiedad intelectual. Y pronto aprendería a construir su refugio incluso en las condiciones más hostiles: oculto entre la multitud de los cafés o encerrado en el baño (el monasterio secular de la lectura), leyendo de pie en la librería ambulante del metro o aislado en su habitación. Como si allí, tendida sobre la cama durante horas, lejos de las llamadas telefónicas y de las comunes presiones cotidianas, en medio del vacío, recordara lo que es estar viva de nuevo. O tal vez eso es lo que han hecho siempre. “Desde un punto de vista pragmático, desde la perspectiva del capitalismo actual, el momento en que un escritor publica (no importa qué, no importa dónde) comienza a vivir bajo la lógica del mercado” (Tabarovsky). Las sociedades que escribían más rápido, ganaban tiempo, es decir, dinero. Partido pirata La cultura actual es una cultura estrangulada, amenazada de muerte. Porque la mayorı́a de los que ahora gritan de entusiasmo y entran en los saloons para beber sin tener que pagar, irán lo mismo a vuestro entierro y jalearán al que os reemplace. La página vacía. Entonces cunde el terror como si la amenaza pirata re- 165 novara su carga sobre los muros virtuales del Estado. Para pensar se necesita tiempo; por eso, en el transcurso de sus trabajos nocturnos, lo único que Jünger toleraba era la compañía silenciosa de los relojes de arena, también llamados “vasos de horas”, asociados a una época y un tempo distintos a los de la era mecanizada, donde las actividades diarias guardaban aún estrechas relaciones con los ciclos de la naturaleza y parecían por eso más humanas. ¡Este día es de fiesta entre los días de fiesta!)". Y esto hacı́a que se viera servida con lealtad y agrado. —Has debido negarte. Pero también recuerda que sin tiempo libre jamás se habría desarrollado la cultura, nadie habría escrito libros ni cultivado las ciencias, tampoco se habría ahondado el pensamiento. Dos años después, la Unión Europea acordó ampliar los límites de la jornada laboral para que un empleado pudiera trabajar “hasta un máximo de sesenta y cinco horas semanales”, si así lo acordaba con el empresario. La sociedad de consumo nunca calculó el enorme abismo que se abriría progresivamente entre la embriaguez que prometían sus publicistas y esta realidad simplemente invivible. Me puse de inmediato a escribir supersticiosamente, creyendo que así me salvaría del castigo, aunque no atiné a escribir nada más que notas para este diario. Confundido, me rasco el cuello. Así pues, tengo derecho a participar comercialmente en el negocio, pero se trata de una circunstancia secundaria que no guarda relación alguna con la verdadera literatura”. Se comprende ahora muy bien, al contemplar el espectáculo del trabajo —es decir, de esa dura actividad que se extiende de la mañana a la noche—, que no hay mejor policía, pues sirve de freno a cada uno de nosotros y contribuye a detener el desenvolvimiento de la razón, de los apetitos y de los deseos de autonomía. Imaginemos que los filósofos se han convertido ya para siempre en burócratas del pensamiento, los escritores en jóvenes promesas adocenadas y correctas, las revistas en réplicas de sí mismas, siempre hablando de los mismos temas, con el mismo estilo, los mismos gestos, el mismo colaborador desfondándose en el maratón de las publicaciones al vapor, las mismas secciones, las mismas formas ensayísticas, los mismos gustos, los mismos homenajes y la misma jerarquía de lo que importa y lo que es insignificante. sí, en aquellos tiempos eran todos unos ojetes abusivos, qué horrendos días aquellos ¡pues también en estos días! Una conjura de seres detenidos en las esquinas, contemplando el cielo, mientras el ajetreo de las avenidas y los automóviles les pasa de lado. Pero esta experiencia de sinsentido súbito podría asociarse también a lo que sucede con los jubilados que mueren de tristeza lejos del trabajo, hombres y mujeres en la última recta del camino para quienes la vida se revela, descargada de pronto de su mecánica estéril, como una habitación inabarcable y vacía. Es posible que te paguen muy bien. Me parece que en lugar de que ese lujo del escritor —ser dueño de su propio tiempo— se hubiera democratizado con el avance de la tecnología, como profetizaban los optimistas de los años sesenta (“las máquinas deben trabajar, los individuos, pensar”, era el lema de la ibm), lo que ha sucedido es todo lo contrario: el escritor ha terminado por renunciar a las horas que le pertenecían para entrar finalmente como empleado en el tiempo-que-esdinero y que lo corroe interiormente, introduciendo también en él un ritmo acelerado, el de las novedades, las convocatorias y las 257 expectativas de los lectores, sus auténticos patrones. ✴ Me pregunto con frecuencia por la situación de todos esos escritores demasiado ocupados que ya no tienen tiempo para escribir, y no sólo por exceso de trabajo, sino por exceso de notoriedad. Kiyoshu Kurosawa, Tokio Sonata (Japón, 2008). Pero durante las vacaciones de verano, mientras mis amigas viajaban a Los Ángeles, pedí trabajo en un taller de edición; quería aprender el oficio. Se trataba de una protesta en Trocadero contra la estúpida guerra antinarco emprendida por el gobierno mexicano, que ya entonces había costado más de 30 mil muertes, un estado injustificable de terror y violencia que se empecinaba en continuar con una estrategia a todas luces fallida. Soy una mujer ansiosa y presa fácil de las adicciones. Una forma de parcelar la existencia en fragmentos definidos y actividades reglamentadas. Hasta que la situación se volvió insostenible. Me volví inencontrable. La disgregación es la mayor de mis debilidades. O como sentencia aquel dicho que escuché a un chileno: “Si el trabajo es salud, que trabajen los enfermos”. Y no se equivocan: nadie como él siente un amor tan intenso por la vida. Luego checaban tarjeta y volvían a su casa, vacíos. Los padres de esta generación pauperizada pertenecían a la clase media, eran lectores de Life, trabajaban en fábricas de electrodomésticos que más tarde compraban frenéticamente en las ofertas. Yo también me inquieto si estoy lejos de la computadora y en cuanto llego a mi departamento me dirijo al monitor, por mi dosis del día. Después de todo, El coche correo inglés no es sino el relato obsesivo de un accidente detenido en el tiempo: el momento en que un coche, en el que viaja el propio De Quincey, está a punto de provocar la muerte de una joven pareja que marcha distraídamente en un calesín. Siendo, como fue, un visionario, Galileo palidecería ante nuestra perspectiva del pensamiento transmitido en tiempo real. La cena se sirve a las 19.16 y se termina a las 19.20 hrs. Como tenía tiempo de sobra fundé, junto con otros desocupados, una pequeña editorial. Beber cantidades modestas de alcohol pueden mejorar tu salud cardiovascular, aunque la investigación sobre esto no es lo suficientemente fuerte como para recomendar que lo bebas con ese propósito. O sí: la ineficiencia lingüística, la suspensión del sentido, el juego, la digresión anarquizante, la neologización enloquecida, la destrucción de la gramática. Nadie parecía preocupado por eso. Cualquiera que por curiosidad se asome a la página legal de Hombre lento de J.M. ¿Por qué no abandonar el trajín y vivir, como había hecho hasta entonces, en la simplicidad? Por eso, preocúpate cuando te inviten a la tele. Ya que son muchos los que vienen a ella precisamente por eso. Las presiones que ejerce el sistema financiero actual han llevado a las corporaciones (empresas sin conciencia ética cuyos intereses están por encima de los individuos) a hacer recortes de personal constantes y sobrecargar de tareas al señor Yagi, para ajustarse a los costos internacionales. Pero el principio de realidad siempre es terrible. ¡Ah Fiesta de los Locos con su carro del Triunfo de Baco, tirado por un centauro macho y un centauro hembra, desnudos como el propio dios, acompañado del gran Pan; carnaval obsceno que tomaba posesión de las naves ojivales! Es curioso que Dios despreciara a Caín precisamente porque en su sacrificio obraba por simple apego al deber, en lugar de hacerlo por generosidad, por amor genuino, como Abel. Si sufres de alergia, tienes un resfriado o malestar en la garganta, calentar un poco de agua y agregarle un chorro de whisky y gotas de limón es un remedio rápido y eficiente para combatir esta clase de alergias y molestias. Fundan repúblicas clandestinas, islas de la camaradería: la República Pirata de Sales, Los Hermanos Avitualladores, los Mendigos del Mar. Mi padre me contó la historia de Mr. Los beneficios del jugo de nopal para perder peso, cada día son más valorados y aclamados. Sin embargo, desde hace algunos minutos alguien llama con insistencia a la puerta. Uno toma notas de su viaje, otro corrige pruebas, el tercero busca citas para su próximo ensayo. pero quitarse la vida, ¡eso sí que es inmoral! En los bolsillos, ni un centavo. Pero también existe su reverso: la tradición de los transmisores infatigables, los héroes anónimos de la letra. Los nuevos ismos: conformismo, arribismo, conservadurismo. Quería simplemente encontrarme en casa, como había hecho tantas otras veces en mi vida, escribiendo. Tiene que pedir perdón a cierta persona. Si el escritor que descubre el mundo con los ojos de la mercancía ha decidido sustituir el riesgo por la eficacia, la incomodidad por el aplauso y la pasión por el cálculo, es asunto suyo, pero ¿por qué demonios su modelo de trabajo y su concepción utilitaria de la escritura ha terminado por imponerse en todas partes? ¡El ensayo le gusta a la farándula! Leo Crash, la novela donde Ballard lleva su meditación sobre las claves de una nueva sexualidad asociada al automóvil hasta sus últimas consecuencias. El bicarbonato de sodio puede tener efectos indirectos sobre la pérdida de peso debido a la combinación de líquidos con los que se suele mezclar. Ópalo de Etiopía: le ayuda a mantener su peso en proporción. Por alguna razón que los sociólogos y los historiadores llamarán misteriosa, sus tropelías, incluso las más crueles, se volverán legendarias; lo mismo que sus batallas contra los tiranos, esa puesta en práctica de sus ideas libertarias. Montevideo / Buenos Aires, Arca / Galerna, 1967. Más información{{/message}}. Y si aman aún los libros con sus portadas, páginas y márgenes, su olor a tinta, sus tipografías y apuntes en lápiz, mis 291 editores tendrán más razones para seguir publicándolos, gracias al precio justo que ustedes han pagado en la caja. Dejó de hacerlo al hacerse un gran silencio. He diseñado minuciosos esquemas de trabajo por horas o cuartillas, he desconectado el teléfono, he restringido mi acceso a internet; pero siempre termino volviendo al desorden de mis impulsos. de las democracias de mercado. En su libro, Jünger interpreta dos conocidos grabados de Durero donde aparecen esos antiguos aparatos de medición temporal: Melancolía y San Jerónimo en su celda. This is the end! La inquisición del mercado nos devolverá a la cultura oral, la perpetuación de las obras de boca en boca, como sucedía en los bosques de Fahrenheit 451. Se escribe a todas horas del día, decía Marguerite Duras, dentro o fuera de la casa, bajo cualquier luz, en cualquier circunstancia. Entre 1994 y 1999, cientos de artistas, escritores, cibernautas, perfomers, okupas y activistas se desplegaron a lo largo de toda Europa, donde aparecían esténciles, pintas, publicidad intervenida, radios libres y fanzines bajo la misma firma. Sólo reúno ideas que pudieran informarnos sobre el futuro de la escritura, un futuro distinto al de la escritura del consenso y la indigencia. Además, el uso de complementos alimenticios a base de colágeno hidrolizado puede ayudarte a lograr tus objetivos. En un par de siglos, la velocidad se ha convertido en el gran absoluto alrededor del cual se organiza todo el sistema, desde las teorías científicas hasta la vida cotidiana, el trabajo, la educación, la comida, los sentimientos. ¿A sus editores? El perezoso es, según la etimología latina, un hombre lento. Me he sentido así alguna vez. No le interesaba ya nada, ni siquiera Salinger. ¿No fueron ellos mismos los que persiguieron —mucho antes de la manipulación genética— el sueño de crear vida humana? Posibles efectos indirectos del bicarbonato de sodio en la pérdida de peso. Pero lo mejor de todo era que, en medio de una de las peores crisis de desempleo en Argentina, la pinta tenía la desfachatez de promover la renuncia 18 en masa. Y no olvido a Barton Fink (John Turturro), uno de los personajes más claramente kafkianos de los Coen, el escritor con bloqueo que se encierra en un hotel siniestro mientras intenta terminar un guión para Hollywood y, en lugar de inspirarse, se sumerge en pesadillas interminables. ✴ Nadie juega por encargo o mandato y, si lo hace, no juega: cumple un deber. Se puede vagar y seguir viendo a los amigos a la cara y hasta invitarles un café. ¿Cómo luchar contra un adversario omnipresente, virtual e indoloro como el mercado? ¡Y ya no es necesaria la prohibición para que nada cambie! Es la hora de la subversión asistida. Esos nombres, tan fríos como las estadísticas, sólo tienden a ocultar la verdadera dimensión humana y trágica de las derrotas cíclicas del capitalismo. Amo absoluto del mar Egeo, Polícrates, el pirata-príncipe (el tirano, para usar el término griego), atrajo a su corte a poetas, médicos y artistas. Que la existencia es el ensayo, el espacio del tanteo, el sopesar de contrario. Es un bribón, un pillo, el que lleva la contra. Por eso, el copyleft distingue con vehemencia entre la piratería como mera prolongación extra legal del capitalismo (con esclavos chinos) y una piratería de espíritu comunitario, que entiende la cultura como una creación colectiva, donde el dinero es sobre todo un estorbo. Como el placer y el juego no suelen ser actividades remunerables, pues de lo contrario se convertirían en tareas y perderían parte de su placer, el escritor, si no ha tenido la suerte de ser aristócrata como Montaigne o heredero como Turgueniev o marido de una viuda rica (una mecenas) como quería Dylan Thomas, tendrá que llevar una doble vida intermitente: artista de noche y burócrata (o cazador de ballenas o fogonero o editora o mesera o periodista de guerra o maestra) de día. Su despreocupación, la manera en que permanece en la cama sin atender la hora del rito laboral, es manifiesto de ateología. de Vivian Abenshushan). Viviendo siempre entre legajos enfangados o llenos de polvo, su rostro es un recordatorio de nuestra propia mortalidad. Desde entonces le rindo culto a la pereza indómita, aunque sea como aspiración lejana y nunca del todo satisfecha. No es tu caso, por supuesto. Las avenidas se van poblando de sombras nerviosas, una masa de semblantes aturdidos que han perdido su rumbo y ya no quieren continuar. desodorante old spices barra, tiendas de camisas para hombre, que es falta de motivación en derecho, partida de nacimiento perú, agendas personalizadas, principios pedagógicos de la educación inicial pdf, celebra tu cumpleaños en cineplanet, escribimos un cuento segundo grado, próximo show de hablando huevadas, requisitos para visita conyugal, pruebas psicológicas ejemplos, decreto legislativo 1057 pdf, vídeos de valores para adolescentes, venta de terrenos en san camilo la joya, pagos a cuenta del impuesto a la renta ejemplo, partituras de martinillo, radisson resort paracas, crema de espárragos campbell's receta, pausas pasivas ejemplos, países importadores de banano, luis rodriguez manzanera, solicitud de constancia de trabajo, cinemark promociones con tarjetas de crédito, dónde queda el circo de la tía gloria, como evaluar una estrategia de ventas, hoteles baratos en punta sal, consulta homologación, ley general del trabajo 29783, clínica delgado resultados, artritis reumatoide caso clínico pdf, cualidades para estudiar medicina, acta de matrimonio civil para llenar, centroides de líneas y áreas, que es el conocimiento filosofía, cirujano maxilofacial perú, como trabajar el cuidado del cuerpo con niños, qué cooperativas cerraron, causas de un conflicto social, cronograma de matricula universidad continental 2021 2, consulta de derechos de autor indecopi, cultura según autores, préstamo para casa propia, matriz de competencias laborales en excel, cuales son los fundamentos de la didáctica, porque tiemblo cuando fumo cigarro, donde comprar ropa al por mayor en gamarra, cursos en senati independencia, smart fit chorrillos faisanes, ventas por teléfono ejemplos, citas de vigotsky sobre el constructivismo, clases de ballet para adolescentes principiantes, curso de tripulante pesquero, decreto legislativo n° 1224, precio fosfato monoamónico, el manual del emprendedor ensayo, contrato internacional pdf, carreras fáciles y bien pagadas españa, discurso para el día del maestro 2022, tabla impuesto vehicular 2022, como saber los socios de una empresa en perú, precio de espárrago en chacra, trabajo en el sector público sin experiencia, levonorgestrel etinilestradiol ventajas y desventajas, sarcletti delivery telefono san borja, a que provincia pertenece huamachuco, repositorio pucp posgrado, universidades en chorrillos lima, ejercicios nomenclatura iupac resueltos, instituto san juan bosco satipo, frases de navidad para tarjetas, ejercicios para prevenir enfermedades cardiovasculares, tabla de detracciones 2022, que espermatozoide fecunda al óvulo, estampado de polos por unidad, acuerdo comercial entre empresas ejemplo, donde queda huancavelica, sesiones de tutoría para secundaria en word 2021, 10 ejemplos de subsidiariedad, capítulos y versículos de la biblia, que es mejor un bloqueador o protector solar, precio de pasaje de lima a tacna en bus,
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